Escuchando a Danny Elfman
febrero 27th, 2009 NereaLo sé, no vamos a batir récords con esta entrada, y no me importa. La nieve es un raro regalo para mi, soy del sur y puede contar con una mano las veces que he visto nevar.
Por eso cuando he visto los copos de nieve detener el tiempo esta mañana, he pillado la cámara y he salido al balcón en camiseta para tocarla.
Acto seguido, y sin guantes, me he precipitado a la calle para ver como estaba el parque.
Al cabo de unos minutos no sentía los dedos pero no me daba cuenta. Hacer fotos y disfrutar de la nevada son dos placeres incompatibles si se realizan de manera simultanea.
Así que tras la sesión de fotos y antes de perder totalmente la sensibilidad en los dedos, escondí la mano bajo el chaquetón y salí del paraguas.
He vuelto a casa caminando, con el paraguas cerrado, los ojos en el cielo y la cara de haberme tocado la lotería. No he encontrado trabajo aun, pero hoy durante media hora, he perdido la noción de la realidad.
He escuchado la música de Danny Elfman y he visto como el tiempo se paraba copito a copito.
La relación entre el titulo y la entrada se la dejo a mis queridos comentaristas, Curro, dales una lección de frikismo cinematográfico, plis.
En un remoto pasado
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