El día que nos pidieron perdón
Volvíamos a casa, tarde, en Jamonera y era justo esas horas en las que el sábado cambia a domingo. Íbamos nosotros tan contentos pensando en el desayuno de antes de irnos a dormir cuando…
Cabróóóóóóóóóóóóón!! El taxista, que no llamaremos señor de momento, decidió cruzarse la carretera sin intermitente, sin mirar y sin ningún reparo.
Nosotros que somos gente de mundo usamos el pito hasta dejarle el tímpano bien sacudido y pasamos por donde íbamos, después de que el frenara a mitad de su ILEGALISIMA maniobra.
Cuatro segundos después nos encontrábamos parados en el semáforo comentando la jugada y el taxi que se aproxima de nuevo, otra vez con una maniobra «rarita». Mirada de no me jodas que terminaremos pegándonos y la maniobra para. Ole, funciona, tengo mirada de psicópata asesino y se usarla.
Pero no, que sigue, que se acerca, que baja la ventanilla… Eah, por me voy a pegar por primera vez con un japones y va a ser un taxista, mira que bien, yo que les iba cogiendo ganas me desahogo por un par semanas.
Mirando por encima del hombro con la mirada comentada, lo dejo que se ponga justo a nuestro lado. Termina de bajar la ventanilla y me suelta,
«Gomenasai, neee» (lo siento)
Joputa, que me pide perdón, y a quien le pego yo ahora? Ademas me lo dice con carita de pena, con un cliente dentro del taxi y estando seguro de que soy un extranjero. Vaya…
Pos nada,
«Daijōbu desu» (pasa nada)
Con la sensación de que un taxista, un señor, nos había pedido perdón a Nerea, Jamonera y a mi por no habernos visto nos fuimos a casa a empezar el domingo contentos. Con algo nuevo que contar y pensando que quizás, en algún lugar, hay taxistas amables que si miran por los retrovisores, que si ponen los intermitentes y que ademas miran después de hacerlo, pero antes de torcer. Y que incluso algunos de ellos piden perdón.
En un remoto pasado
Hace unos 365 días, relatábamos Costumbres
Hace unos 730 días, relatábamos Proxima estacion Lorca, ciudad del Sol
Y es que en esta vida hay de todo… taxistas asesinos o taxista arrepentidos, jajajaja.
Y mejor no pegarse !!!! 😉
Un abrazo !!!
Lo poquito que faltó para llegar a las manos, no? aunque veo que te quedaste con ganas de darle una sacudida, jeje. Suerte que todo quedase en un perdón, y todos tan contentos, sobre todo por el desayuno que tenían en mente 😀
@Nuria y @Javier I. Sampedro: Si pegarle no le hubiéramos pegado, seguro, no somos ninguno de llegar a las manos. Pero que ganas de rallarles el coche más de una vez si que dan.
Si es que taxistas psicópatas bipolares hay en todo el mundo!! 😛
Es lo q tienen los taxistas, fijo q por aqui por España pocos te pedirian perdon,jeje
Aqui en España ademas de llevarte el susto, si se te ocurre pitar, el joputa y las dos hostias ta las cantan ellos a ti. Estos japoneses son cojonudos, Guillermico haznos hueco a Sonia y a mi que volvemos otra vez, pero a quedarnos.
Aqui en España ademas de llevarte el susto, si se te ocurre pitar, el joputa y las dos hostias ta las cantan ellos a ti. Estos japoneses son cojonudos, Guillermico haznos hueco a Sonia y a mi que volvemos otra vez, pero a quedarnos.
Que tengan un robot gigante en un parque pasa,que coman pescado crudo…vale, que tengan un tren que no toca el suelo…bien, que te tengan trabajando y encima te pagen ….mmmm vale,pero que un taxista pida perdón…eso, eso ya no hay quien se lo crea.
Allí piensa siempre bien Gulliermo…y acertarás!
Un abrazo!
Cobardes, raYar el coche en lugar de darles la galleta de frente…
Bien por Curro, no esperaba menos al leer esa sangrante LL en medio de ambas aes, me hizo un daño retinal del cual aún me estoy recuperando…no se si podré ir a trabajar esta tarde…
Por lo demás…parece inverosímil la historia, no conocía taxista así…pero…vamos a concederte el beneficio de la duda Lorcoman…
Aunque ahora que lo pienso, como era la noche de cambio de sábado a domingo…y considerando el posible contenido de polialcoholes e hidrocarburos en sangre…igual es lo que TÚ o VOS DOS creíais que estaba pasando, cuando en realidad echaba culebras por la boca…no sé, no sé…realidad, ficción?
@Berto del Puerto y @Curro: Gomen, neee!!!
Me he raYao
Gente de poca fe¡ Pos claro que hay gente buen por el mundo, da igual que sean gajin o japoneses. Y ¡ojito!, nada de llegar a las manos, guapitos, que los japos saben judo y cosas de esas y podeis salir «tocaos».
Y Curri6to, el RALLADOR, suele rallar. Y la RAYA, es otra cosas. ¡que no se diga
Gente de poca fe¡ Pos claro que hay gente buen por el mundo, da igual que sean gajin o japoneses. Y ¡ojito!, nada de llegar a las manos, guapitos, que los japos saben judo y cosas de esas y podeis salir «tocaos».
Y Currito, el RALLADOR, suele rallar. Y la RAYA, es otra cosas. ¡que no se diga ,que tú eres de letras, cariñito!
Voto por el trastorno bipolar. La maniobra a la brava forma parte del exámen para taxista, es internacional; lo que me cuesta asumir es que exista un taxista (mira que rima más maja), que conoce las palabras mágicas y pide perdón sin estar bajo coacción.
@Sol: No se, no se, en serio que parecía arrepentido. Sonreia con cara de «LO SIENTO» y todo mientras lo decia
@necuro: Gracias por esa defensa de la ortogRafia, que sino me matan, jooo
@Berto del Puerto: Yo no bebo NADA cuando vamos con Jamonera, pero puede que el cansancio si hiciera mella y oyese voces que no estaban allí. Aun así, casi seguro, el tipo pidió perdón.
Gomenasai, neee, Lorco…gomesai neee
Creo que había visto uno de tus vídeos de Lorco Ninja por Cojones y se acojonó el tío 😉
Un día me explicais con calma como funciona el tema de semáforos por allí, vale? xDD Qué me traen de cabeza porque no les entiendo 😛
Saludos!