Los hombre nacieron iguales, desnudos, sin ligaduras
Dicen que el 30 de Diciembre de 1896, a las siete de la mañana Jose Rizal se encontraba de espaldas al pelotón que lo fusilaría, los numerosos españoles que presenciaron el crimen gritaron: !Viva España! y la banda militar tocaba la Marcha de Cadiz.
No podían quedarse así las cosas, no podía Cadiz quedar ligado a la historia de este pequeño GRAN hombre tan solo por una marcha el día de su injusta ejecución.
Y no sera así, nos enteramos por Adela que HOY, un viernes, Jose Rizal pasa a tener un busto en Cadiz. Mirando al mar, en la Alameda Apodaca, un pequeño acto que acercará un poco más a Filipinas de España.
De Jose Rizal mucho se ha dicho, casi todo mejor de lo que yo podré jamás decir. Juan Goytisolo habla de él y de su obra más importante «Noli me tanguere», «¿Quién conoce en España a José Rizal? La extendida ignorancia de lo escrito en nuestra lengua en Iberoamérica a lo largo del siglo XIX abarca también, y se acentúa, en lo que concierne a las remotas y olvidadas Filipinas.»
Miguel de Unamuno se curró un Epílogo para Vida y Escritos del Dr. José Rizal de W.E. Retana que más que un epílogo parece el libro en sí.
«La España del ¡viva España! sacrílego que se lanzó sobre el cadáver de Rizal es la España de los explotadores, los brutos y los imbéciles; la España de los tiranuelos y de sus esclavos; la España de los caciques y los dueños de grandes latifundios; la España de los que sólo viven del presupuesto sin ideal alguno.»
(Mini colaboración de Nerea al hilo de la cita de Unamuno tan bien elegida por Lorco)
Después de más de un siglo, sus palabras siguen conservando su valor y elocuencia. Los latifundistas tienen ahora oficinas y enchufes por doquier. Mientras, los razonables y justos son gente competente que se ve obligada a aceptar que se la rebaje, gente honrada a la que se estafa con total impunidad, gente que después de recibir una (hasta ahora) buena formación, deja su casa para buscar un lugar donde se aprecie dicha formación en lo que vale porque las ofertas de trabajo son de risa. «El fatuo es el que se endiosa, el que embrutece a otros y anhela someter a sus caprichos al razonable y justo.» Este post va dedicado a los que seguís en casa, luchando, aguantando y sacando de donde no hay, rechazando que os ninguneen, a los Rizales de andar por casa que no tienen un busto mirando a la bahía, sino mucho por delante todavía.
Lo que más me sorprende siempre de Rizal era que el quería a España, se sentía tan español como filipino, su único fue querer que se reconociese esa igualdad, que se terminase lo que ahora se llama «el mamoneo» y conseguir aquello de vivir felices y comer perdices.
Lo que más me jode de todo esto es que el libro por el que finalmente fue ejecutado, Noli me Tanguere, está escrito en español y ahora, gracias a la «magnífica» política que se efectuaba en la época en Filipinas, casi ningún filipino puede leerlo. Deben conformarse con traducciones al inglés o al tagalo.
Perdón, que me pierdo, que me pierdo; un genio capaz de escribir en su cautiverio, sabiendo que lo iban a fusilar un poema como «Mi último Adiós» se merece un busto, una estatua y doce avenidas con su nombre.
Os dejamos con la primera y la ultima estrofa
Mi último Adiós
Adiós, Patria adorada, región del sol querida,
Perla del Mar de Oriente, nuestro perdido edén,
A darte voy, alegre, la triste, mustia vida;
Y fuera mas brillante, mas fresca, mas florida,
También por ti la diera, la diera por tu bien.
[…]
Adiós, padres y hermanos, trozos del alma mía,
Amigos de la infancia, en el perdido hogar;
Dad gracias, que descanso del fatigoso día;
Adiós, dulce extranjera, mi amiga, mi alegría;
Adiós, queridos seres. Morir es descansar.
En un remoto pasado
Hace unos 365 días, relatábamos Salto al vacío
Hace unos 730 días, relatábamos Zapatos nuevos
Hace unos 1095 días, relatábamos Animales metálicos
Hace unos 1460 días, relatábamos El Lorco Ninja
Hace unos 2189 días, relatábamos Surrealismo, de nuevo, en Manila
Hace unos 1824 días, relatábamos Sin Smint no hay beso
Gracias a los dos y mi admiración a un hombre que murió fusilado sin causa alguna para ello, tan solo por desear un mundo mejor para todos. «Noli me tanguere» es un libro que muchos deberían leer para conocer mejor a una de nuestras «grandes» posesiones y a un pueblo que lucho por su libertad. Y ese poema…..
La verdad es que Filipinas siegue siendo la GRAN colonia desconocida en españa, y eso que nos aporto mil cosas, entre ellas dejo a este GRAN hombre.
al menos ahroa se le van reconociendo meritos.
Interesante historia que por desgracia no conocía. Gracias por compartirla
Un placer, a vosotros, reyes de la mochila, os encantara Filipinas y antes o después pasareis, seguro!!
Qué triste que haya pasado un siglo desde que D. Miguel de Unamuno escribió ese epílogo y continuemos igual.(Y no sigo porque me entra una mala leche… y es lunes).
Gracias por ésta entrada.
verdad??
A nosotros nos paso lo mismo leyéndolo, se te ponía una mala ostia de esas del tricornio!!
Gracias a vosotros por leerla y comentar. Es bonito, aunque de rabia, que estas historias aun signifiquen algo para quien las lee…
NereLorco, entretiene y educa 🙂
Escribes un post sobre tetas, barras chocolateadas con sabor a pollo o el ultimo meme de moda y te caen doscientos comentarios. Cada cual comenta lo que quiera… Incluso alguien que nos recuerde que nos es heroe todo el que palma fusilado por un regimen imperialista… A seguir bien. Lo siento Mahal, lo tenia que decir.
MAHAAAAL!!
lo hacemos por amor, no por los comentarios 😉