¿a Cuenca?, ¿a la mierda?, ¿a la luna?, ¿al infinito y mas allá?

Kamakura reloaded

¿Preparados para la versión señordelosanillistica de nuestra excursión a Kamakura? No, nadie lo esta. Nisiquiera yo, por lo que os vamos a obsequiar con una version Lo mejor que le puede pasar a un par de gaijines en Kamakura es…

  1. Que se les animen el Chiki (ya todos sabéis quien es) y un nuevo coleguilla gaijin: Gabby. Ex compañero de curro de Guillermo en Manila y pinoy para mas señas que ademas controla japonés que te cagas.
  2. Que un compi del Guille que es mu buena gente nos enchufe a su papi Hirata-san de guia de la muerte pela.
  3. Que haga bueno. Ni lluvia ni frio.
  4. Que no haya millones de turistas. Este ultimo detalle nos fallô, porque aquello parecia el metro de Tokio en hora punta.


    Antes de contaros la excursion dediquemos un momento a nuestro guia. Hirata-san es técnico en Canon, pero los fines de semana (uno de cada dos) sirve de guia voluntario y gratuito (hay que ver como se puso cuando decidimos invitarle a comer!!!) para turistas que hablen inglés. El tio controla cantidad y ademas esta estudiando español. Es la caña, nunca es tarde para esta gente!!! Nos enseñô a purificarnos antes de entrar en un templo, a pedir deseos a los dioses y a deshacernos de la mala suerte. Y fue quien nos dio todos esos datos que me sirvieron para confeccionar la pequeña loca historia de Kamakura.

    ¡Pues empezemos! Nos dirijimos primero al Hachiman Jinja desde el paseo enmarcado por las famosas puertas rojas custodiadas por los leones coreanos (que sî que representan el alfa y el omega del universo shintoista con sus bocas una abierta y otra cerrada).

    Llegando al templo hicimos nuestros pinitos purificandonos y fuimos testigos de una boda por el rito shinto aunque rodeados de turistas cuesta creer que la pobre pareja estuviera pendiente de la ceremonia pero se les veia tope contrentaos. Eso si, como no solo con agua se purifican los nipones ahi teneis un surtido variado de sake para santificar las fiestas…

    Luego vino lo del arbol del traidor y el decimo tercer escalon, y al final de la escalera el gran templo de Hachiman (dios de los guerreros) donde pedimos deseos y preguntamos sobre el porvenir… Fernando tuvo mucha suerte, sin embargo yo tuve que atar mi porvenir con los malos porvenires para intentar cambiarlo. Hahaha .Si eso no funciona me quedo preñada! Que mal rollo colega…

    Bajamos del templo por una callecita comercial muy mona, con cantidad de tiendecitas y nosotros sin un duro… Al final de la calle entramos en un restaurante y degustamos sushi de bonito y salmôn muy ricos y una especie de menú que nos llenô después de la pequeña caminata. Hirata-san estaba apurao porque le habîamos dicho que queriamos ver el océano y nos metiô un poco de prisita para poder hacerlo todo. El tren local parece un tranvía de estos del año de la polca y estaba a reventar. Llegamos al Tera Hase-dera (budista) donde nos espera la colección mas impresionante de figuritas en miniatura. Primero los Jizo, o pequeños budas protectores de almas de niños no natos cuyos nombres estan escritos bajo cada pedestal. Segundo, las estatuillas de Benzaiten (unica diosa de entre los 7 grandes de la creencia japones y pa colmo la del mar y lo stsunamis..machistas hasta pa eso…) en una cueva que parece la mina de los enanitos de Blancanieves. Pero no solo de estatuillas vive el turismo.


    Aki lo que mola es ver las estatuas mas tochas o con las historias mas rallantes. Y para eso los nipones que escriben las guias tienen mucha imaginación. En Kamakura tenemos como estatuas representativas a :Hasse Kannon, la estatua de esta deidad asexuada cuyo mérito esta en que llego a nado desde Osaka hasta Kamakura con sus 11 cabezas intactas. Yakuyoke, la estatua dorada del dios protector contra los espiritus malignos de la que no se pueden sacar fotos…ejem ejem..

    Pero el indiscutible, inigualable, el auténtico, el famoso Buda de Kamakura (como es lo que que dice el Papi del Buzo? Pregunta solo para los portuenses). Esta gigantesca estatua de bronce representa al Amida Buda (o Buda sentado) y desde 1495 medita al aire libre desde que un tsunami arrollara el templo que la cobijaba. Lo que mas mola del Buda es que se puede meter uno dentro!!! Pero habia cola, asi que nos piramos a ver algo aun mas grande: el OCEANO PACIFICO.

    Después del momento OCEANO, culminamos la visita con un descubrimiento: como hacen el café los japos, la foto es para que nos digais como va. Que hace tiempo que no montamos concursos. Dentro de unos dias ponemos el video explicativo con la solucion. A mi en cualkier caso me parecio casi magico, me tomé el café y mira que no me gusta nada!!!!

    De vuelta para casa comentamos lo de ir a cenar, e Hirata-san en seguida se apuntô. Como nos daba rollo que se viniera hasta el centro pa luego volver otra vez a Yokohama decidimos cenar en Yokohama, en el barrio chino, que él lo conocia mu bien. Cenamos como cerditos y para bajar la cena fuimos al Puerto de Yokohama, el famoso puerto del Porvenir, primer puerto maritimo abierto al comercio con occidente. Las fotos recuerdan un poco a Hong Kong, ¿verdad?
    Y cerramos el dia con el funambulo, espectáculo espontaneo que puso el broche de oro a un pedazo de dia. Una vez mas nuestros mas sinceros agradecimientos a Gabby por algunas fotos y sobretodo a Hirata-san por su tiempo y su saber hacer.

    Y su promesa de llevarnos a ver el cambio de color de las hojas de los arboles en noviembre!!!!!

    6 Comentarios a 'Kamakura reloaded'

    Subcribirse a los comentarios con RSS

    1. Nerea dice:

      Guillermo llegara pronto a poner las fotos en su sitio.. disculpen las molestias.

    2. OSCAR dice:

      que largo!!!

    3. Fernando dice:

      Gran día que pasamos. Y subrayo que Hirata san es un crack que se ha quedado con ganas de enseñarnos más. Eso es que aún no nos conoce bien.

    4. mahal dice:

      vale lo pillamos, post todos los dias, a ser posible en varios idiomas y cortitos, y de postre que van a tomar los señores lectores. I am Jack’s post-slave complex.

    5. […] decidimos imitarles. Nuestro insuperable guía, Hirata-san, nos había ofrecido cuando fuimos a Kamakura llevarnos él a ver el fenómeno y claro, no pudimos resistirnos. Nos llevó a un montecito, […]